Casa Hogar Fundación Parlas IAP está dedicada a atender a personas con discapacidad intelectual, en situación de abandono. ¡Ayúdanos DONANDO!
Fundación PARLAS IAP inició su labor en 1968 como una asociación civil que ofrecía los servicios de una escuela de educación especial y rehabilitación a niños y niñas con discapacidad intelectual, síndrome de Down y problemas de sordera.
Se originó como una iniciativa de padres de familia que buscaban una alternativa educativa y de atención para sus hijos y otros menores con discapacidad intelectual, dada la carencia de servicios educativos en esa época.
La escuela se encontraba ubicada en la colonia Roma, teniendo inicialmente clases de educación especial y terapias de rehabilitación, todo ello financiado por medio de las colegiaturas que pagaba cada uno de los padres de familia.
En 1980 la escuela cambia de sede, gracias a una donación que realiza el Gobierno Federal, con el fin de contar con un nuevo inmueble al poniente de la Ciudad de México, en donde actualmente se proporcionan los servicios de la organización.
Este cambio de inmueble trajo consigo, mejoras sustanciales en los servicios que se proporcionaban: mayor número de salones, áreas verdes y un lugar designado para instalar una cocina y el comedor. En esta época y durante 5 años aproximadamente (de 1980 a 1985) se contó con la participación de profesores especializados en la atención a menores que presentaban problemas de: aprendizaje, retención y alteraciones conductuales.
Sin embargo, más adelante se presenta una situación complicada para la organización: el cierre de distintos programas del área educativa (al grado de únicamente contar con una clase en educación especial), para dar prioridad a aquellos programas o actividades enfocadas al “cuidado” de las personas, dentro de un espacio designado para fungir como estancia; este enfoque se dio sobre todo por el cambio de la dirección de la institución.
Otro cambio importante se presentó en el año de 1992, cuando la asociación se transformó en Institución de Asistencia Privada ante la Junta de Asistencia Privada del DF, sufriendo cambios dentro del órgano de gobierno y la estructura en institucional.
En 1997 se rediseñaron los objetivos de la organización, ya que la escuela se convirtió en una casa hogar. Los servicios educativos dejaron de funcionar al interior, lo cual derivó en la permanencia de pocos alumnos, quienes eran atendidos en un “Centro de día”, que funcionaba como una estancia donde “pasar el día”.
Caso contrario, el volumen de usuarios dentro de la casa hogar, se incrementaba poco a poco, teniendo hasta 40 personas dentro del inmueble atendidas, con la salvedad de que no existía un perfil de la población definido para prestar de manera adecuada los servicios que necesitaban, dentro de la organización.
En el aspecto financiero, las colegiaturas y aportaciones por donativos eran insuficientes y los servicios de casa hogar se encarecieran, teniendo un efecto al largo plazo que se vio reflejado en la insostenibilidad de los servicios: las necesidades básicas como la alimentación no podían cubrirse en su totalidad y con la calidad requerida.
Aunado a lo anterior, se presentaban otros problemas dentro de la institución: no se contaba con documentación de las actividades, registros o expedientes de los usuarios, mientras que el personal operativo (el cual era escaso) realizaba sus actividades con la población de manera deficiente; el inmueble comenzó a sufrir deterioros, por la falta de mantenimiento, mientras que la improvisación para implementar una casa hogar, fue evidente en los espacios en los cuales se pretendía albergar a las personas y que no cumplían con las condiciones para proporcionar un espacio adecuado.
Durante 10 años, la institución operó (y sobrevivió) sin un perfil de la población claro, programas definidos, servicios sostenibles y personal capacitado para atender a los usuarios de la casa hogar de manera digna y confiable.
Es a partir del año 2008, que se emprende una reformulación total de la institución, comenzando a definir el perfil de la población que sería atendida, a fin de tener claridad en los servicios que serían proporcionados a los residentes; comenzaron a realizarse mejoras al inmueble y se consolidó un equipo de trabajo, dedicado a proporcionar un servicio de calidad a la población.
Actualmente se atiende a un grupo de beneficiarios más homogéneo: personas con discapacidad intelectual, de ambos sexos, cuya edad debe ser a partir de los 18 años de edad, pudiendo recibir atención en 2 modalidades:
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No olvide que la información completa sobre Fundación Parlas I.A.P. en Álvaro Obregón siempre puede encontrar en el sitio web oficial, en la oficina de la empresa o llamandoles por teléfono ↓
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